He cofundado dos startups (faro.travel y consultok.com) y he vivido en carne propia el proceso de formación de ideas, validación de modelo de negocio, creación de primeros equipos, y por supuesto la experiencia de tener cofundadores.

Con maravillosos aciertos y también algunos errores que se han convertido en aprendizaje, vengo a compartir después de 7 años de emprendedor, cuales son desde mi punto de vista, las 3 cosas que hay que tener a la vista para crear un equipo fundador excepcional.

1.- Número de cofundadores

La primera pregunta que aparece cuando uno está en el proceso de creación de una startup es: ¿Cuál es el número de cofundadores perfecto para que un proyecto sea exitoso?

En mi opinión, el número de fundadores no es lo más relevante, pero si tiene impacto en algunos aspectos. Por ejemplo, no es lo mismo ser un cofundador con 100% de participación accionaria, que 6 cofundadores con 17%. 

Al levantar capital, ese porcentaje se irá diluyendo y si son muchos, puede que vayas perdiendo los incentivos en el proceso.

Por otro lado, si eres solo uno, lo más probable es que no logres encarnar todo el conocimiento y “manos” que se requieren en las etapas iniciales. Y sobre todo, emprender es un proceso duro, y muchas veces solitario e incomprendido. Y si además de las dificultades que vienen por defecto, le agregas el tener que enfrentarlo solo, probablemente el camino se hará muy cuesta arriba.

Sam Altman de YCombinator señaló en su minuto que el número perfecto es 2 o 3 cofundadores. Para él uno no es óptimo y cinco es muy malo. Algunas veces funcionan los de 4, pero lo ideal es 2 o 3.

Si miramos ejemplos de empresas exitosas con 2 cofundadores encontramos a Slack, Google, Microsoft, Uber, Instagram, Whatsapp o MercadoLibre.

Buscando empresas con 3 podemos visualizar a Pinterest, Airbnb, Wework, Apple (si bien tenía dos “rostros principales”) o SalesForce.

Igualmente eso tendrá sentido, pero hay casos en que un solo cofundador puede hacer cosas increíbles como Jeff Bezos con Amazon o Yvon Chouinard con Patagonia. O aún más sorprendente es el caso de Alibaba con 18 cofundadores.

En nuestro caso, con Faro éramos 4 cofundadores y con Consultok somos 2 pero abiertos a que se una a este desafío una tercera cofundadora. Tú eliges tu número perfecto, pero ya sabes algunos patrones.

2.- Cada cofundador con su personalidad y conocimiento: los complementos

Se ha estudiado mucho sobre esto y hay muchos artículos al respecto. Se habla de que siempre debe haber un experto en negocios y un experto en tecnología. Otros le agregan al experto en diseño. También se habla de las personalidades y algunas veces de los logros pasados. Para mi es clave que dentro de las startups existan los siguientes arquetipos que pueden ser encarnados por una persona o varias:

El “visionario” es aquel integrante que su pasión desborda por todos lados. Se obsesiona y conquista a todos los que están a su alrededor. Da la sensación que nada lo detiene. Tiene empuje y atrae con una visión y personalidad. Magnético.

Suele ser el motor de la cultura y también quien conquista al talento externo para que forme parte de la compañía. Es el “Steve Jobs o el Shakelton”. Esa imagen del que es capaz de ver el futuro antes que el resto y lograr embarcarlos en ese sueño. Es alguien que logra conectar y comunicar con destreza. Se siente cómodo convenciendo a otros o haciendo presentaciones por todas partes. Lo escuchas hablar y es inspirador.

Suele ocupar el rol de CEO o CMO.

El “constructor” es el que logra interpretar la visión y convertirla en un producto. Es un obsesionado por las nuevas tecnologías y suele tener una mente matemática y lógica. Ama los problemas, por que son oportunidades para desarrollar algo que los resuelva.

Si uno tuviera que poner tres tareas que le encantan, sin duda serían solucionar, estandarizar y automatizar. Gracias a él la startup podrá escalar desde el producto y estará para apagar incendios que siempre aparecen desde el producto. Es el partner del visionario. Juntos son dinamita. Es un gran “doer”. Una imagen clara de el es Steve Wozniak o el Elon Musk.

Suele ocupar el cargo de CTO o CPO.

El “artista científico” es el amante de la estética, la usabilidad y es un empático del mundo que lo complementa con las métricas. Cuando trabaja de la mano con el constructor logra que ciertas cosas inentendibles para el mundo sean interpretadas por este experto y se conviertan en productos sin fricciones, bellos y fáciles de digerir.

Le gusta conversar con la gente para profundizar en los dolores y el arte de observar. Comunica con imágenes, gráficas, infografías y mensajes inspiradores. Suele tener mucho estilo y una personalidad algo alternativa. Es innovador y creativo. Le aporta a los equipos con un “hacer” desde la estética. Joe Gebbia en Airbnb suele ser el referente de este personaje.

Suelen ocupar el rol de CMO o CPO. Pero se han creado cargos especiales para ellos como el de Chief Creative Officer. Su arma suele ser el diseño y su expertise UX y UI.

El “businessman” es el que ama implementar rápidamente el modelo de ingresos. Que saca indicadores financieros para entender todo lo que está pasando y le encanta entrar en fases de valorización y relacionarse con inversionistas. Nadie entiende como el los riesgos y su aproximación de costo beneficio lo hacen muy racional y mente fría.

Pocas veces son las “entrañas” las que lo llevan a tomar decisiones y es el mejor compañero de un proceso de levantamiento de capital. Se complementa muy bien con el visionario por que ve la otra cara de la moneda. Suele ser de mente matemática y frío. Con él te sientes en buenas manos en el manejo financiero. Jeff Bezos.

Suelen ocupar el cargo de CEO o de CFO. Según la cultura de la empresa. Pero aunque no sean CEO suelen trabajar muy alineados con el en los procesos de levantamiento de capital.

3.- La dedicación al proyecto

Un tercer elemento clave para tener en consideración es la dedicación al proyecto. Si antes dijimos que era importante que una startup cubriera con el número de cofundadores la soledad y dificultades que muchas veces ocurren en el proceso de emprender, la dedicación es aún más importante en eso.

100% de dedicación todos los founders si o si. Y esto no necesariamente debe ser al principio, pero debe estar como un objetivo en el corto o mediano plazo en la medida que se vayan cumpliendo hitos. Debe hablarse, establecerse los objetivos e incluso establecerse en el pacto de accionistas como aproximarse a eso (vesting, cliff, etc.).

Los equilibrios son importantes, y si tienes a algunos integrantes dejando “la piel en la cancha”, es indispensable que dejen la piel juntos. Ni siquiera que el que lo haga tenga más premios que el otro. Todos juntos levantando el sueño con el mismo compromiso y dedicación. Si no, el emprendedor que está en la operación suele tener de jefe a un directorio al cuál rendirle cuentas, en vez de tener a pares que lo ayudan a construir el sueño.

Esto además suele ser un atributo importante para los inversionistas. Y como digo, puede tener diferentes plazos, acuerdos y formas de ejecutarlo. Pero desde la visión, todos deben estar juntos en el viaje.

Olvida todo lo anterior

Cada startup tiene su propia realidad, y si bien pueden haber ciertos patrones o buenas prácticas, eso nada te asegura a nivel de éxito, y el no tenerlos, no significa que puedas construir un proyecto exitoso.

Finalmente, lo más relevante será compartir una visión, los valores y saber convivir juntos en el viaje de emprender.

¿Cómo ha sido tu experiencia?

Consultok.com buscando cofundadora

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Este artículo se enmarca dentro de un experimento de 50 días que busca implementar un pequeño life hack de mejoras marginales en el cuál escribiré 50 artículos, haré 5.000 abdominales y leeré 1.000 páginas de un libro en otro idioma. Puedes ver los detalles aquí.